martes, 2 de febrero de 2010

Play, play, play...


Yo quería seguir buscando tu mirada entre todos (los de siempre). Porque sabes que esta canción me recuerda a ti desde la primera nota. Siempre he pensado que enero es un mes nostálgico. O tal vez sea el mes perfecto para pedir deseos... la primavera hace que todo se conceda. Ya sabes que la primavera te necesita.
Enero me regala todos esos recuerdos que guardé en un cajón desordenado pero, a su vez, me trae más felicidad de la permitida. ¿Dónde está el límite? ¿Cuándo dejarás de besarme? Las risas de fondo ponen la banda sonora a este [nuestro] momento. Vemos una película en la televisión. Se hace el silencio. Me miras a escondidas. Y te como hasta el último lunar mientras empiezas a desabrochar cada uno de mis botones.
Aún no comprendo cómo he podido memorizarte con tanta perfección. Las madrugadas nos sorprenden entre luces y despertares sin miedo. Porque la distancia entre dos puntos es algo muy relativo.
Sin pretenderlo ni pensarlo, las cosquillas nos invaden a diestro y siniestro. Y entre risa y risa te miro sin saber muy bien qué estoy haciendo ni a dónde voy. Pero, ¿sabes qué? Ya no me importa encontrar la respuesta.

8 comentarios:

galmar 3 de febrero de 2010, 1:40  

qué lindo! el texto y la música :)) todo :)

eliú 3 de febrero de 2010, 3:21  

enero es un buen mes para los deseos, siempre lo creí y lo creeré...


"...Porque la distancia entre dos puntos es algo muy relativo..."

demasiado relativo... doy fe de aquello...



i.

Dara 3 de febrero de 2010, 4:31  

Me gustan las invasiones de cosquillas los jueves por la tarde. Si tienen que colonizarme que sea con una de esas, por favor. Aunque si es con una invasión de abrazos rompecostillas también me parece bien.



(un mimo
para tu amiga
aviadora y un
vaso de leche
para ti)

pintamonadas 3 de febrero de 2010, 7:42  

siempre creo que una estacion que traiga vestidos y fulares tiene que ser maravillosa. La primavera creo que lo calma todo, el tiempo las ganas y los deseos. Quiero que sea marzo en la ciudad.
:)

Espiritu Zen 3 de febrero de 2010, 10:45  

Dejarse llevar suena demasiado bien...

Anabel 3 de febrero de 2010, 11:21  

Te envidio... a mí la primavera sólo me trae melancolía... a ver si consigo que ésta sea diferente!
Precioso texto
Besos

Luna Roi 3 de febrero de 2010, 17:18  

El cajón de este invierno tiene mucho fondo. Estoy acobardada debajo del edredón. Me duele el frío en el alma (hielo azul), y el cuerpo (espinas) de no saber más que de mí... Siento pereza de este tránsito.

Logos, vectores y viceversa 3 de febrero de 2010, 21:37  

Qué te pasa pequeña?