Sábanas.

jueves, 15 de enero de 2015

He encontrado un sitio donde el futuro no existe o, si existe, no da miedo. Un lugar donde el lobo se deja acariciar, donde los acantilados no dan vértigo, donde el vértigo no es más que un puñado de mariposas revoloteando por lo interno. Algo efímero. He encontrado un lugar donde las lentejas no están tan malas, donde los lunes son menos lunes, donde las entrevistas de trabajo salen bien, donde los te quiero salen a borbotones, sin pausa y sin medida. Aquí, las canciones de Nacho no duelen tanto, la aguja del pasado ya no pincha, conseguimos abatir al no y al sí. Este sitio tiene la banda sonora que tú quieras ponerle, el sabor de un tequila sin recuerdos. No hace falta abrir piernas para cerrar heridas. Ven, que te espero, como cada día. Ven aquí, entre mis sábanas. Para ti serán chalecos antibalas.

2 comentarios:

Eder Morales Adame 20 de enero de 2015, 19:39  

Hola octubre. Yo era uno de esos que pataleó cuando cerraste (al menos por un tiempo muy largo) este pedazo de mundo regido por letras de amor en vino. Era un lector muy anónimo hasta hoy, te cuento que yo también me enamoré en Octubre, y hay ciertos lunares que podrían hablar de muchos suicidios, espero no dejes de compartirte.

Mi blog por si decides saber de mi, y lo que causas:
http://olvidearte.blogspot.com/

Luna Méndez 10 de febrero de 2015, 14:17  

Me lo creía todo, menos que aquí las canciones de Nacho no duelen.

Eso si que es imposible.

Pero me encanta. Sobretodo el final. Qué forma tan genial de terminar un texto redondo