domingo, 3 de julio de 2011
¿Te acuerdas?
¿Sabéis esa sensación que te entra por algún lugar del cuerpo (yo creo que por la nariz, con el aire) y se te queda dentro, pellizcándote, cuando no puedes descoserte una persona de la piel? Cuando empiezas a recordar cada una de las idas y venidas, cada olor, cada momento. Ese glorioso instante en el que te das cuenta de lo que has perdido, de cuánto echas de menos a una persona, de cómo nada es lo mismo (ni los cafés, ni los conciertos). Y todo se hace cuesta arriba. Y pese a que seas la que haya decidido poner punto y final a este libro, su recuerdo te araña por dentro. Y las heridas empiezan a salir a la luz. ¿Alguien tiene mercromina? A mí se me ha acabado.
Y aunque fui yo quien decidió que ya no más.
Y no me canse de jurarte que no habrá segunda parte
me cuesta tanto olvidarte...
14 comentarios:
Justo lo que siento.
Dejar marchar las cosas que llevan con nosotros tanto tiempo se hace realmente difícil... Pero al final, cuando te quieras dar cuenta, terminas por darles las espalda. Casi sin querer.
Conozco demasiado bien esa sensación.
(me encantó esta entrada <3)
Me encanta esa canción de Mecano.
No recuerdo haber dicho adiós a algo a lo que luego me arañase por dentro. No conozco esa sensación, pero... Mmm... Tengo mercromina de curar otras mil heridas, te presto la que quieras :)
Ése es mi temor. Beijinhos.
uufff a veces parece que es imposible cicatrizar!
una tirita! :)
Bonita canción la de Mecano. Piensa que es fácil volver arriba una vez que estás abajo.
Vivirás.
¡Un beso y ánimo!
había borrado la entrada porque por un momento pensé que no se merecía que le dedicase algo así. pero es lo que sentía y siento. y aunque me duela (y ahora le de igual), me acuerdo de todo lo vivido y digo sin sentir vergüenza que le echo de menos.
Al final, de tanto recordar sus palabras, su olor y cada milímetro suyo dejas de vivir en la realidad. Pero la verdad es que adoro ese lugar sin fin, en el que puedo gritar alto que le echo de menos.
Me encanta la entrada, un abrazo.
JOUPS!!! :(, yo se lo que es esa sensación....
dadle la vuelta a la tortilla. pensad que no estoy hablando de un chico. pensad que hablo de una amiga. entonces todo duele un poco más (sobre todo para las personas que hemos comprendido que la amistad está por encima del amor).
Las separaciones siempre son dolorosas, sobretodos aquellas de las personas que te han marcado o con las que has compartido momentos, como tomar un café o bailar una canción. Pero recuerda que cada final es también un principio :)
A mi la mercromina dejó de hacerme efecto hace tiempo...¡Habrá que pasarse al betadine! ;-)
Me siento identificada con tu blog.. ¡mucho ánimo y un abrazo grande! *.^
Publicar un comentario